martes, 9 de octubre de 2018

Esa tormenta

Esa tormenta 

Irrumpió en la noche oscura
Sin previo aviso, sin truenos
Se precipitó repentinamente
Millones de gotas simultáneas
Estábamos rodeados de agua y ruido
Aislados del resto del mundo
La luz del primer rayo llegó
Con la sinfonía húmeda golpeando
Seguido del más grande estruendo
Quisiste ver todo por la ventana
A través de cristales empañados
Cada relámpago resaltaba tus curvas
Desvestida sentiste frío inexistente
La tormenta veraniega era cálida
Tu mirada me llamó a cubrirte
Mi cuerpo sobre el tuyo te dio paz
En medio de la inesperada tempestad
Una fuerza incontenible nos rodeaba
No había nadie a quien recurrir
La Naturaleza no discrimina a nadie
Arrasaba e inundaba a todos por igual
Nos mantuvimos firmes, muy abrazados
Esperamos el final sin ningún temor
Hasta que esa tormenta también terminó
Pudo haber sido bastante horrible
Pero nada haría olvidar el último beso
El Universo lo supo y solo quedó el Amor

(C) Daniel Oliva ~ Martes 9 de octubre de 2018 ~ 02:55 hs.

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